20.3.13

Conferencia ''Violencias opresoras. Imágenes de libertad''

Hoy he tenido el placer de asistir a la conferencia ''Violencias opresoras. Imágenes de libertad'' organizada por el departamento de servicios sociales de la Universidad de Valladolid e impartida por Marifé Santiago Bolaños, profesora de Estética y Teoría de las Artes en la Universidad Rey Juan Carlos, poeta y novelista.
Y bien digo he tenido el placer porque, a pesar de no haber dejado indiferente a nadie y de los crudos y sobrecogedores testimonios que hemos podido conocer, está ponencia nos ha servido para poner los pies en la tierra y reflexionar sobre la situación de maltrato, vejación y enorme desigualdad en la que se encuentran multitud de mujeres.

Marifé nos habló de mujeres valientes de todo el mundo que, por ejemplo, se atrevieron a dar clase a niñas en aquellos países donde estaba prohibido. Y denunció la realidad de muchas mujeres que se encuentran sometidas a la explotación sexual como soborno, a violaciones y a una continua humillación.
No obstante, además de estas imágenes de violencia opresoras, Marifé también nos mostró imágenes de libertad y esperanza; con sus palabras apeló a la educación y a la cultura para hacer frente a la barbarie. La educación entendida como una fuente que mana continuamente libertad, dignidad, respeto...

Paul Gaugin, Parau api (¿Qué hay de nuevo?)

Además, pudimos ver el corto ''Pour Quoi?'' realizado por la fotógrafa española Ouka Lelee en el que da a conocer el testimonio de una mujer periodista de la República Democrática del Congo que denuncia la violación sexual y el acoso al que se encuentran miles de mujeres y niñas en este país por parte de militares y rebeldes.

Después de ver el corto, entiendo perfectamente el título del mismo. ¿Por qué?
Sinceramente, desde mi punto de vista, creo que actualmente estos abusos y atrocidades se siguen dando porque simplemente no interesa sacarlos a la luz.  Ciertas compañías y multinacionales no quieren cambiar su actual situación y únicamente están centradas en sus propios intereses, a pesar de dar falsas lecciones de responsabilidad social en muchas de sus campañas publicitarias.
Vivimos en un mundo en el que se presumen de una igualdad entre hombres y mujeres que en la mayoría de los casos no es efectiva. Presumimos de derechos y libertades que en otras partes del mundo ni si quiera han sido reconocidos
Por eso, lo que podemos hacer como ciudadanos es denunciar estas situaciones, darlas a conocer (aunque molesten a determinadas entidades o colectivos) y poner los pies sobre la tierra. Reflexionar sobre hacia dónde queremos ir y si es este mundo-burbuja de cristal el que verdaderamente queremos. 

19.3.13

La educación como industria del deseo

Tras leer el artículo de Joan Ferrés sobre La educación como industria del deseo, me gustaría hacer algunos comentario y reflexiones, que apoyan las ideas que nos trasmite el autor.

Es cierto que siempre ha existido un continuo debate sobre la emoción frente a razón, y la razón frente a emoción. No obstante, parece que la emociones tiran más que las ideas. O sino, que se lo digan a la publicidad. Ésta tiene algo que hace que deseemos los productos que anuncia. 
Sin embargo, no ocurre lo mismo en el ámbito educativo, donde los profesionales de la educación (a pesar de poseer conocimientos, valores... de vital importancia) no saben crear ese deseo que haga más atractivos sus productos. 
Por eso, la clave está en apelar a las emociones y generar el deseo en las personas, tal y cómo se hace a través de los medios de comunicación. Saber responder a la pregunta yamiké que se hace el usuario. De está forma, las personas se movilizarán más y de forma más afectiva, en vez de utilizar la agresividad y el miedo.

Detalle de la pintura  La escuela de Atenas, imagen: Wikipedia

Joan Ferrés se refiere a la educación como una industria, ya que lo que tiene que hacer es transformar los viejos contenidos para que parezcan más nuevos y atractivos, como hacen los publicitarios con las marcas y productos. 
No obstante, en esta tarea tampoco se puede dar todo el protagonismo a la emoción. En el ámbito educativo lo correcto sería aprovechar la capacidad movilizadora que tienen las emociones para fomentar el deseo de pensar y aprender.

8.3.13

Cuestión de sentido común

Tal y como dice Wikipedia, hoy 8 de marzo, es el Día Internacional de la Mujer Trabajadora o Día Internacional de la Mujer, en el que se conmemora la lucha de la mujer por su participación, en pie de igualdad con el hombre, en la sociedad y en su desarrollo íntegro como persona. Pero personalmente creo que en este día, y durante todos los días del año, lo que habría que denunciar es la enorme situación de injusticia en la que se encuentran millones de mujeres en todo el mundo: peores empleos, salarios más bajos por desarrollar el mismo trabajo, dificultad para acceder a altos cargos, etc.
Anselm Feuerbach – Ifigenia (segunda versión) 1871. Imagen: lostonsite.wordpress.com

Y, aunque creemos que hemos avanzado en comparación con la situación de la mujer hace cincuenta años, el progreso no es tanto como pensamos. 
Sobre este asunto, hoy he leído un artículo bastante interesante de El País en el que se expone la denuncia que hace la periodista Lynn Povich sobre cómo los derechos de la mujer se han estancado. Según esta periodista, “ha habido enormes progresos, sobre todo en los puestos intermedios, pero es un hecho que solo el 15% de los altos cargos está ocupado hoy en día por mujeres”
Muchas veces desde los órganos de gobierno se presume de la moderna sociedad en la que vivimos y de lo mucho que se está invirtiendo en políticas que ayuden a conseguir la igualdad entre hombres y mujeres. Sin embargo, no se trata de una cuestión de modernidad ni de política, se trata de una cuestión de justicia y de sentido común.


Ilustración: El Roto

7.3.13

Conferencia de Alberto Olmos

Ayer, 8 de marzo, asistí a la conferencia que impartió el periodista y escritor segoviano Alberto Olmos en la facultad de ciencias sociales, jurídicas y de la comunicación de la UVa (campus Segovia).
A pesar de la enorme afluencia de gente, Alberto compartió con todos nosotros algunas de sus experiencias y opiniones sobre la situación del mundo literario, y nos presentó su nuevo libro POSE.


Me llamó especialmente la atención lo mucho que ha cambiado, en apenas quince años, el mundo de las editoriales. En los años 90 la opinión de los críticos literarios era muy importante, hasta tal punto que sus opiniones podían demoler un libro. Actualmente todo esto ha cambiado; con las redes sociales, blogs... cualquiera puede dar su opinión sobre una obra literaria. La reciprocidad y las respuestas múltiples están más presentes que nunca, haciendo que de alguna forma el mundo de la crítica literaria se haya democratizado.
Alberto Olmos también habló sobre sus libros, sobre su estancia en Japón durante más de 3 años y sobre cómo se produjo su iniciación en el mundo de los blogs. Os animo a que visitéis el suyo: Hikikomori
Fotografía: Asís G. Ayerbe